Viajero, acércate a esta ermita al atardecer, después de las lluvias. Convence a los propietarios para que dejen llegar a ella y podrás ver su nave sumergida bajo el agua. Siéntate junto a sus paredes. Poco a poco un ejército de vacas se acercarán a beber. No las ahuyentes. Forman parte del paisaje. Accede a la parte alta del coro y todavía podrás contemplar escenas pintadas en sus muros. Insólito.
No has de preocuparte. La Torre de los Mogollones te protege. Si tienes suerte la luna irá asomándose en el horizonte, por donde el Salor. Y si permaneces un rato más, verás su silueta reflejada en el agua.Ya las vacas se habrán ido a pasar la noche.
No has de preocuparte. La Torre de los Mogollones te protege. Si tienes suerte la luna irá asomándose en el horizonte, por donde el Salor. Y si permaneces un rato más, verás su silueta reflejada en el agua.Ya las vacas se habrán ido a pasar la noche.